A partir de un proyecto impulsado desde el Instituto de Física de Materiales Tandil –IFIMAT- de la Unicen, en articulación con la Secretaría de Ecología Popular del Movimiento Evita y con el acompañamiento del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, se puso en marcha una nueva unidad productiva para la fabricación de planchones ecológicos de telgopor reciclado para el mejoramiento de viviendas en los barrios populares de nuestra ciudad.

Esta iniciativa, que está integrada por 6 jóvenes del Movimiento Evita y del área de Infraestructura del MTE, apunta a potenciar el empleo joven en nuestra ciudad, como así también mejorar viviendas precarias y avanzar en una propuesta amigable con el medioambiente.

La idea surgió de un grupo de investigadores y becarios de CONICET que desarrollan sus tareas en el IFIMAT, en la Facultad de Ciencias Exactas de la UNICEN. Los investigadores Marcelo Stipcich y Diego Velázquez, junto con Luciano Villalba de la Facultad de Ingeniería, son los principales impulsores del proyecto.

Desde el IFIMAT, el investigador Diego Velázquez explicó que se trata de un proyecto de investigación que nació en base a la demanda concreta de las organizaciones en cuanto a qué hacer con ciertos tipos de materiales que se recuperan mediante distintos círculos y que no tienen valor de mercado ni un circuito para reinsertarlos en el ciclo productivo.

Fue así que comenzaron a investigar qué alternativas había y a estudiar las propiedades de hormigones alivianados con plástico y telgopor reciclados. De esta manera, encontraron distintas composiciones que cumplen con las propiedades físicas, tanto mecánicas como térmicas, de acuerdo a los estándares que se piden para la construcción de viviendas.

Así, surgió esta línea de trabajo que consiste en la reutilización de este tipo de materiales en hormigones alivianados para fabricar elementos de construcción. Comenzaron por ladrillos, bloques, veredas, revestimientos y en este momento junto con el Movimiento Evita están llevando adelante la producción de paneles.

En ese sentido, destacó que no sólo se está respondiendo a la necesidad de reutilizar esos materiales y de darles un valor, sino que mediante el agregado de valor con trabajo local y preferentemente cooperativo, también se están generando elementos constructivos que permiten el mejoramiento de viviendas en Tandil.

Por último, Velázquez remarcó las distintas tareas que llevan adelante desde la Unicen y el Conicet, tanto para controlar constantemente la calidad del material, como así también para innovar con las composiciones e ir probando cómo satisfacen o no las normativas vigentes. Y, por otro lado, la capacitación y el acompañamiento que se les brinda a los trabajadores de las cooperativas en todo el proceso hasta que se establece el protocolo y la forma de trabajar para llegar al producto final.

Por su parte, el articulador del Centro de Referencia Tandil, Nicolás Carrillo, explicó que esta propuesta tiene como principales objetivos la generación de empleo juvenil, el mejoramiento de viviendas precarias en los barrios populares y el desarrollo de una nueva iniciativa amigable con el medioambiente.

“Nos da mucha alegría esta articulación con la Universidad para impulsar el trabajo joven en Tandil, como así también el mejoramiento habitacional en distintos barrios. Este primer diseño de planchones servirá para el revestimiento de casas precarias para mejorar su eficiencia acústica y energética, y el próximo paso es avanzar concretamente con estos trabajos para estudiar la calidad del producto y empezar a producirlo en serie”, detalló.

Los vecinos y las vecinas que tengan telgopor y quieran colaborar con este proyecto, pueden acercarlo todas las mañanas a la unidad productiva ubicada en calle Sandino 122.