El acto reunió a un centenar de vecinos y vecinas, y contó con la presencia del intendente Miguel Lunghi, la delegada del Gobierno Vasco en Argentina, Sara Pagola, el presidente de la Federación de Entidades Vasco Argentinas (FEVA), Asier Iriberri, y la presidenta del Centro Vasco "Gure Etxea" de Tandil, Graciela Confalonieri, entre otras autoridades.

Tras el corte de cintas, se sucedieron las palabras de las autoridades y una nutrida agenda cultural con danzas tradicionales vascas, interpretaciones de los "Chikis" y presentaciones del grupo de percusión "Tamborrada" y del conjunto folklórico "Orejanos".

Durante su discurso, el intendente Lunghi expresó: "Este paseo nace como un lugar de encuentro, de descanso, de juego. Pero también como un reconocimiento merecido a una colectividad que ha aportado, durante generaciones, trabajo, valores, integración y cultura al desarrollo de nuestra ciudad".

Y agregó: "Hoy más que nunca necesitamos espacios que inviten al encuentro. Que abracen las diferencias y generen diálogo. Porque en tiempos de tanta división, Tandil reafirma su vocación de comunidad abierta, plural y solidaria".

Lunghi también agradeció al Centro Vasco "Gure Etxea" por su compromiso con la ciudad y al trabajo compartido con el Municipio, a través de la Dirección de Espacios Verdes, para materializar este proyecto.

La presidenta del Centro Vasco, Graciela Confalonieri, agradeció a quienes hicieron posible la realización del paseo y destacó:

"Este paseo se ofrece como un espacio donde la naturaleza, la historia y la comunidad se encuentran".

Por su parte, Sebastián Elissondo, también integrante de "Gure Etxea", subrayó el valor del trabajo colectivo:"Fue necesario un gran trabajo en conjunto para concretar el sueño del Paseo de los Vascos, y agradecemos profundamente a cada una de las personas e instituciones que pusieron su granito de arena".

Durante la ceremonia, además, se plantaron retoños del roble de Guernica, descendientes genéticos del árbol histórico ubicado en la Casa de Juntas de Bizkaia, España. Este roble es un símbolo de las libertades tradicionales del pueblo vasco. En la actualidad, existen numerosos retoños del roble de Guernica plantados en distintos lugares del mundo, incluso en Argentina.

El Paseo de los Vascos, ubicado en Dante Alighieri y Margarita Galfre, se proyecta como un nuevo espacio de encuentro y celebración de la diversidad, que suma identidad, memoria y futuro al patrimonio urbano y cultural de Tandil.